Las noticias importantes deben ser contadas por todos los medios. Esta frase podría ser la premisa oficial de cualquier libro de estilo periodístico. Y es fácil darse cuenta al ver cada día varios telediarios, escuchar diferentes informativos de radio o leer más de un periódico. A más de uno nos ha pasado eso de ver una noticia en una cadena y al cambiar de canal, volverla a ver con prácticamente los mismos planos y la misma información. Es el efecto si no estás, no eres buen medio.
Pero ahora lanzo la pregunta, ¿qué es lo más importante, estar presente y medir lo noticiable por el nivel de los demás medios o cubrir lo que cada uno considere que es noticia? ¿Los medios miden la actualidad según la agenda de los medios competidores? ¿O realmente coinciden porque es una verdadera noticia?
En este tema también podemos recordar la presión de la agenda prefabricada por los políticos y actos sociales obligados. Si el alcalde de tal ciudad va a inaugurar cierto edificio o va a poner la primera piedra de algo, ahí van los medios para darnos imágenes de la dichosa piedra. Quedarán meses y meses por delante hasta que las obras, que sabemos que no son rápidas, se acaben. Pero la foto del alcalde con la piedrecita debe salir en prensa.
¿Qué podemos hacer los periodistas? ¿Tenemos libertad para elegir las noticias? ¿Podremos "venderle" al redactor jefe de nuestro medio los temas interesantes que pasan? Habrá medios más libres y medios más encerrados en las agendas impuestas. Pero analizando la actualidad que nos presentan estos intermediarios del proceso comunicativo, algo claro es que no podemos quitarnos de la cabeza la idea con la que empezaba: si eres un medio de renombre y no sacas aquello de lo que hablan todos parece que perderás el estatus mediático. ¿Qué pensáis vosotros?
En este tema también podemos recordar la presión de la agenda prefabricada por los políticos y actos sociales obligados. Si el alcalde de tal ciudad va a inaugurar cierto edificio o va a poner la primera piedra de algo, ahí van los medios para darnos imágenes de la dichosa piedra. Quedarán meses y meses por delante hasta que las obras, que sabemos que no son rápidas, se acaben. Pero la foto del alcalde con la piedrecita debe salir en prensa.
¿Qué podemos hacer los periodistas? ¿Tenemos libertad para elegir las noticias? ¿Podremos "venderle" al redactor jefe de nuestro medio los temas interesantes que pasan? Habrá medios más libres y medios más encerrados en las agendas impuestas. Pero analizando la actualidad que nos presentan estos intermediarios del proceso comunicativo, algo claro es que no podemos quitarnos de la cabeza la idea con la que empezaba: si eres un medio de renombre y no sacas aquello de lo que hablan todos parece que perderás el estatus mediático. ¿Qué pensáis vosotros?
